Astrid Gonzáles, artista visual de la ciudad de Medellín, Colombia convierte en metáforas visuales la historia de la cultura afrodescendiente de Colombia. Con la fotografía, el dibujo digital, la experiencia sonora, el video y la escultura como lenguaje plástico con el que manifiesta reflexiones estéticas y críticas sobre la representación del cuerpo afrodescendiente, el racismo, la invisibilización, la hibridación de la cultura y las batallas políticas sobre el reconocimiento étnico como estrategia de orgullo ancestral.
Durante su semestre de pregrado en el 2016 lleva la investigación y cuestionamiento de la cultura afrodescendiente a su libro Ombligo cimarrón, investigación creación, en el que revisa los símbolos de la cultura afro que habitan en los espacios domésticos y en los modelos de construcción de la vivienda en el Pacífico colombiano; analiza cómo estas memorias colectivas y sentidos simbólicos mutan o se transforman en las migraciones internas de Chocó-Medellín.
Analizamos algunas de sus obras en las que pudimos identificar el significado y la relación que tienen los objetos con la historia de una cultura.
En su serie fotográfica Cultura negra, evidencia las estrategias humanas de adaptación y resignificación del territorio de las mujeres cimarronas. El uso del joto (sábana usada como contenedor de ropa) y el velo sobre sus cabezas, figuran un bodegón de frutas que envuelve las semillas que representan la constitución de sociedades libres; desde una lectura antropológica, devela la construcción de la cultura, reconociendo su entorno natural, la adaptación o transformación de él.
El joto se convierte en una pieza escultórica que representa la relación, la falta de aceptación de lo propio y la transformación de una cultura que se amolda a las necesidades del contexto y la migración, por ejemplo, en su obra escultórica Nuevas africanías a partir del joto afrodescendiente, podemos interpretar esta transformación de comunidad agrícola a una comunidad urbanizada y despojada de sus tradiciones.
A partir de la historia afrodescendiente los objetos simbolizan la memoria, sacando de contexto objetos domésticos que cargan con un significado de luchas raciales, de poder y económicas. La obra Pronunciar perejil en la masacre, surge del asesinato de afrodescendientes por no poder pronunciar la palabra perejil, bajo la orden del general Rafael Trujillo. Una palabra tan banal, se convierte en un arma que decide la vida y toma ventaja del poder de una “civilización”.
El trabajo de investigación de la artista es muy amplio, ya que visibiliza una cultura que desde la colonización ha sido rezagada y minimizada por su aspecto, tradiciones e ideologías. Personifica cada momento histórico y representa la transformación y adaptación de la comunidad afrodescendiente colombiana.
Si te interesa conocer más sobre el trabajo de Astrid Gonzáles, este jueves 11 de marzo 3:00 pm hora México y 6:00 PM Chile estaremos platicando con la artista desde nuestra cuenta de instagram: